No entiendo la necesidad de entrar al refugio, donde está mi niño interior. Para jugar un rato con él y abandonarlo en un sitio peor. No sé, por qué decidiste fingir que te agradaba mi manera de ser. Para tan sólo cambiarme, por lo que en tus otros amigos te gusta ver. Creí que podía seguir mi instinto para rodearme de gente sincera. Pero me demostraste, que mi sistema funciona con flaqueza. Como una marioneta oxidada perdí utilidad. Y terminé siendo el chico de vitrina, para sacar en alguna festividad. Para que escuchaste los altos y bajos de mi vida. Si ibas a mostrar más interés en lo que ocurre en las noticias. Para que despertarme en las mañanas con un buenos días. Si desde un principio te parecía algo incómodo en tu día a día. Por que darme un texto largo diciendo que no me ilusione con verte. Si cuando te fuiste de la ciudad decirte que te voy a extrañar es algo no pude contenerme. Para que despedirnos diciendo que nos gustaría viajar juntos nuevamente. Para luego de...